YOLANDA ORTIZ, JUSTICIA SOCIAL Y AMBIENTAL

 

Yolanda Ortiz

*Por Alejandro Gimeno

El 22 de junio, para muchos, es un día más. Para las y los argentinos, debería ser un día de congoja, y de recordación a una de esas mujeres, que fueron, son y serán ejemplo.

El 22 de junio de 2019, murió una de las mejores mujeres que dio la argentina, y que, desde una edad temprana, se identificó con el dolor de los desprotegidos de esta patria. Su nombre puede que no nos diga nada, que no la conozcamos, pero fue la primera, la número uno en su campo. Su nombre es Yolanda Ortiz

Dicen los datos, que Yolanda había nacido en 1923, en la provincia de Tucumán, era bajita y su piel tenía el color de la tierra, parecía frágil. Gracias a las políticas universitarias del gobierno peronista, estudio Química en la Universidad de Buenos Aires, posteriormente realizó estudios de postgrado en la Sorbona de París.

Cuando terminó la escuela secundaria, su familia se trasladó a Buenos Aires, y como la urbe porteña la agobiaba tanto, eligió el camino de la solidaridad, y fue así como comenzó a participar en las actividades sociales de la parroquia de su barrio. Fue en las villas de emergencia, que conoció el dolor de las personas y sus condiciones de vida.

Fue esa realidad social injusta, la que pesó a la hora de la decisión de qué carrera estudiar en la universidad, y fue así como, conjugando compromiso social y estudios, se recibió de licenciada en Ciencias Químicas, (una de las primeras mujeres en esa especialidad).

Trabajó en el sector privado, y en el sector público, siguió militando en las villas de emergencia, buscando solucionar los problemas ambientales de los barrios marginados. 

En los años ´60 -siglo pasado-, mientras los bastones largos, vaciaban nuestras universidades nacionales, Yolanda obtiene una beca para estudiar en la universidad parisina de La Sorbona, para estudiar EL tema de su vida, la contaminación en los ambientes de trabajo. Estando en París, participa del Mayo Francés, y sus reivindicaciones sociales.

Yolanda, en una declaración periodística a la colega Verónica Engler (para Página 12, en 2013), manifestó: “...Me interesaban mucho las condiciones de trabajo de los obreros, porque no había nadie que controlara eso, siempre ganaba la patronal. Decidí ocuparme de eso porque pensaba que podía hacer algo, siempre por la búsqueda de la justicia social, y de que realmente los trabajadores tuvieran un ambiente digno de trabajo…”

Cuando lee el “Mensaje Ambiental a los Pueblos y Gobiernos del Mundo”, que el Gral. Perón, publicó desde su exilio madrileño en 1972, Yolanda se sintió interpelada, y consideró ese mensaje de Perón como la Biblia ambiental para los gobernantes.

El Gral. Perón, publica el “Mensaje Ambiental a los Pueblos y Gobiernos del Mundo”, unos meses antes de la Cumbre de Estocolmo de 1972, (leer DÍA MUNDIAL DEL MEDIO AMBIENTE, O LA DEFENSA DE NUESTROS RECURSOS NATURALES). Este mensaje, pone en el eje de la discusión, los modos de producción del Sistema Capitalista (que se encontraba en esplendor de su Fase Productivista, y faltaban pocos meses para una fuerte crisis energética) y como la contaminación de ese modelo de producción, dejaba consecuencia en el Planeta y los seres humanos; y le proponía a los gobiernos del mundo, preocuparse y ocuparse de la cuestión ambiental (énfasis en la palabra ambiental y no medioambiental).

En 1973, con la asunción del Gral. Perón a la presidencia de la nación, Yolanda Ortiz, se convirtió en la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente Humano dentro del Ministerio de Economía que dirigió José Ber Gelbard. Porque el problema del ambiente era la contaminación, y esta la producían las empresas privadas, por lo tanto, era un problema que debía resolver el Ministerio de Economía.

Para reforzar este criterio, que el problema ambiental es la economía, la propia Yolanda Ortiz, en un reportaje que le realizaron en el 2008, lo explico así: “...Los temas ambientales son cuestiones económicas, no se puede lograr un desarrollo sustentable sin superar la pobreza, hay que llegar a lograr una armonía entre la producción y el ambiente...”

Con la muerte de Perón y un José López Rega, que se inmiscuyo en todas las áreas del gobierno de la flamante presidenta María Estela Martínez de Perón, Yolanda se retira del gobierno nacional, ante la discrepancia de trasladar la secretaría de Recursos Naturales y Ambiente Humano a la órbita del Ministerio de Bienestar Social (dirigido por el propio López Rega).

Durante su gestión a cargo de la secretaría, impulsó cambios en materia ambiental que las empresas privadas, tuvieron que realizar. El cambio en las condiciones ambientales de trabajo, propuestos por Yolanda, fueron la excusa para que el Poder Económico, utilizara a sus esbirros militares (después del derrocamiento de María Estela Martínez de Perón), para perseguirla; eso motivó su exilio en Venezuela, donde se dedicó a la actividad académica, hasta que retorno con la primavera alfonsinista.

Yolanda Ortiz, siempre pensó que la transformación ambiental, está conectada con la educación, fue por ello que desde su retorno al país en la década del ´80 -siglo pasado- se dedicó a capacitar en materia ambiental.

En todo el recorrido de Yolanda, la protección de los Recursos Naturales y el ambiente, estaban directamente ligados a la figura de los seres humanos, y así como en ningún gobierno del Gral. Perón hubo un ministerio de Acción Social, (porque todo el gobierno, era socialmente justo), en ningún escrito de Perón o de Yolanda Ortiz, encontraremos la palabra medioambiente, porque esa esconde un significante perverso, porque saca el componente humano, del ambiente.

Para comprender el compromiso político y ambiental de Yolanda, debemos recordar una frase, que nos debería acompañar en estos días, “No hay Justicia Social, sin Justicia Ambiental”.


*Periodista. Responsable Periodístico en Agencia de Noticias Clandestina ANCLA

Comentarios