El pasado viernes 10 de octubre, se sancionó la ley 26.522 de Servicios de Comunicación Audiovisual, por la Cámara de Senadores del Congreso de la Nación , y al mismo tiempo promulgada por la Presidenta , mediante el decreto 1467/09.
Podemos decir entonces, que el Pueblo ha ganado “La madre de las batallas”, y no que se ha sancionado una “Ley de Medios K”, o como titulo Clarín: "Kirchner ya tiene su ley de control de medios"; porque como efectivamente lo expresó la Senadora Giri
También, tomo las palabras del Senador Fabián Ríos, al sostener que hay que desdramatizar el tratamiento de esta ley, a la que las grandes corporaciones mediáticas han tomado como una contienda, de la cual se dicen víctimas del supuesto abuso de poder por parte del Gobierno; cuando en realidad, hay que dejar en claro, que son los mass media, quienes han actuado de forma deshonesta, al construir una realidad exacerbada a raíz de sus opiniones incoherentes.
Para confrontar en un debate, es necesario un sólido argumento, y no un capricho inquisidor, producto de que son tocados intereses espurios, que si bien para unos pocos son la llave de la felicidad, para el Pueblo son letalmente nocivos.
Pero el Pueblo después de 26 años dijo Basta!, a través sus representantes, quienes han votado por la afirmativa, y más aún, manifestando pacíficamente en la puerta del Congreso, celebrando este acontecimiento, que también contribuye a la Liberación Nacional.
Podemos decir, además, que de cara al Bicentenario de la Patria , esta es una gesta más de la Independencia de nuestro Pueblo, en lo que respecta a los ciudadanos y ciudadanas librepensadores, como lo fueron los y las periodistas desaparecidos, quienes lucharon contra los que pretendieron y pretenden dominar el pensamiento crítico.
Mientras haya pluralidad de voces - y no mordazas, ni censuras indiscriminadas-, y entendamos que desde la diversidad se puede converger, habremos logrado un salto cualitativo como sociedad; porque habremos comprendido que no se trata de un “todos contra todos”, sino de algo tan sencillo, como que la libertad de uno comienza donde termina la del otro.
*Directora Revista Ida & Vuelta
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